sábado, 26 de julio de 2008

Un "claro que no te olvido"



Dicen que escribo para no pensar
sin pensar lo que escribo
sin decidir lo que siento
lo que percibo
si me lamento o me encierro
en una noche sin palabras.

Yo, simplemente,
amo y soy amado
desde mi primera infancia
por el rastro de tus ojos
por los besos enterrados
en un origen que desconozco.

Es facil ser amado
si lo amado no te dice:
-Cariño, duerme a mi lado,
que ya es de madrugada.

Creo que soy una ninfa
que baila en el agua mientras duermes
y los ojos no temen ver si se altera
el ronquido y la ola,
la calma y la deshonra.

Yo no soy ese hombre diferente
ni siquiera soy distinto
ni guardo paginas de plata
en cajones cerca de tu mano.

Yo no soy esa sombra
que te dice dulce al oido:
-Cariño, ven conmigo,
que tengo miedo a perder la alegria.

No me alejo, escucho una cancion,
sueño y despierto, vengo aqui y te cuento.

No se lo que digo, ese es mi silencio.
Solo sé que algo cambia si te tengo.

Cerca del origen de aquel beso,
en una trinchera cosida con los ojos cerrados.










lunes, 7 de julio de 2008

Dos versos

Me sobran dos versos inquietos
que se arremolinan en el regazo.
No los quiero ni los pretendo
¿Quién los quiere? los regalo.
¿Quién se atreve a disuadirlos
de la bruma y del espanto?
¿Quién pretende tan siquiera besarlos?.
Regalo los dos versos
que me tienen atormentado.